pero ¿quien lo pierde? no se pierde, se renueva, como la energía, como decían en ciencias naturales, es como un ecosistema, como cuando nos morimos y se nos comen los gusanos, igualito, yo se lo doy a alguien y me llega de tantas maneras, me llega con la canción, con el viaje que se acerca, y el que me llegó, con esa pequeña conversación intranscendental, e igual con las que no lo son, con las esperas, y las palabras, y los gritos, y yo también lo doy, y a veces es superficial, e incluso a veces lo privo, para darlo, más y más, mas fuerte, lo guardo, lo estoy recibiendo, lo siento, también en los entrecejos, o cuando me aburre, cuando ya no lo noto, love is in the air, eso dicen, yo no huelo, sólo a veces, con la primavera, pero esta siempre allí, esa gente nueva, por conocer me dice que lo tiene, que me lo va a dar, a mostrar, o se lo dará a otro, y yo sentiré que también lo comparto, con quien quiero, con quien de verdad quiero, o no, igual ni lo sé o se me deja dar, yo lo doy de todos modos, pero no lo reciben, peor para ellos, yo no lo pierdo, si acaso lo comparto que no es lo mismo, y así se recicla, y me llega en otras palabras, en las escritas, en la memoria, en las que elaboro, en las que invento, me las repito para mí, me las quedo, y nunca lo he perdido, lo dado nunca es perdido, we will recive que dice, eso sí, siempre, por eso looooooooosing love es sólo parte de la aventura, siempre vuelve, y se queda en tí, cuando lo das, cuando lo repartes, no es tal la generosidad, es por la supervivencia, así va, se queda, permanece, se evapora pero está, en este olor, de las palabras, de la memoria, de la ensoñación del duermevela en el que vivimos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario