Cuenta Carmen Posadas en el artículo del País Semanal de hoy, que una de las metáforas a veces empleadas para describir el enamoramiento es "la teoría de la cristalización" o el conocido como "engaño" de Stendhal.
En palabras de dicha periodista, este fenómeno consiste en lo siguiente: "cuando uno se enamora, se produce el mismo fenómeno que cuando se arroja un tronco seco en una mina de sal. La sal recama el tronco de bellísimos cristales que nos hacen ver como una joya lo que no es más que una rama vieja". Pasado el enamoramiento, se acaba la cristalización y volvemos a ver el tronco tal y como es. En otras palabras, la persona a la que amamos no tiene ni la mitad de las virtudes que le atribuimos (...).
Segun mi opinión, el proceso es ligeramente matizable. Cuando uno se enamora, no lo hace ni de una ramilla seca, ni de un cristal de Sbarowsky, sino que elige, en realidad, lo que a sus ojos es el diamante más puro y perfecto de la tienda. Sabe que ese diamante tiene alguna muesca, que ya ha sido usado o que su valoración en quilates no es la más alta del mercado, pero, sin embargo, para el comprador, ese es el más deseable de todos los que ha visto jamás. Voy a intentar explicarme sin metáforas mercantilistas que sólo degradan tan bello asunto. Lo que quiero decir es que, cuando uno se enamora, sabe, más en el fondo o menos dependiendo de sus capacidades de racionalización, que el objeto de su ceguera no es el Adonis o la Venus subidos en el pedestal con que sueña todas las noches. Se trata más bien de un tipo normal, anodino para otros pero, para ella, maravilloso en su normalidad.
Lo que ocurre es que el amor es así: irracional. Ciego. No ciego porque nos impida ver, sino porque él mismo, como ente abstracto gracias al cual elegimos a nuestra víctima (si la víctima del amor no somos nosotros mismos) no atiende a razones lógicas. El defecto en el ser amado es, por eso mismo, no la mayor de las virtudes, pero sí un amable, divertido, comprensible o entrañable rasgo que hace al otro "especial".
¿Por qué? A parte de porque la naturaleza es sabia y nos ha creado estúpidos y tendentes a la exigencia baja en beneficio de la supervivencia de la especie, porque cuando nos enamoramos las virtudes eclipsan los defectos. Eso es lo bello del amor, a mi parecer. Por eso acertaba "queen" cuando decía que "everybody needs someone to love": necesitamos amar a alguien para creer que existe algo lo suficientemente bueno como para seguir adelante. Ese alguien es, además, un anómalo ser con el que conectamos, que nos ayuda a desasirnos de la soledad en que creemos vivir. Es, pues, maravilloso y compatible, lo cual, con mucha suerte, (porque allí radica el mayor obstáculo) implicará un sentimiento recíproco que se consumará en el verdadero amor.
Luego ya vendrá, si hay mala suerte y la magia acaba (utilizo esta palabra, magia, porque no soy muy ducha en términos ni realidades científicas, pero seguro que existe una explicación con feromonas y demás que lo explican a la perfección), el momento en que ese tipo se vea, así, como un tipo más, menos adónico (o venusina, dependiendo el sujeto amante) que antes, o más cotidiano que especial, o, en el peor de los casos, el momento en que las virtudes desparezcan bajo la sombra de los ya no tan entrañables defectos.
De cualquier modo, quién sabe si gracias a la Sabia Madre Naturaleza que nos creó felices y útiles en nuestra ignoracia o gracias a dios, somos el único animal que tropieza varias veces con la misma piedra, y por eso, una vez tras otra, si nos atrevemos a ser valientes, nos enamoramos, probamos, amamos, sufrimos y, lo más importante, vivimos.
15 comentarios:
Estoy totalmente de acuerdo contigo, sólo quisiera añadir que a veces se confunde el amor con la pasion.
Puedo "enamorarme" de una sonrisa, de una mirada pero al final me doy cuenta de que no es amor, para mi es solo pasion, una tortura más.
Mi problema es que no sé distinguir las dos cosas hasta que los sentimientos se desvanecen por completo. Pero es verdad que cuando "amo" a alguien, idealizo la situacion y no veo los defectos del producto (para emplear el voc mercantil).
Y sigo esperando a la persona con quien me enamorare o quizas la tengo a mi lado y no me doy cuenta de que esta aqui.
Pero hoy tengo la prueba de que a veces los sueños se hacen realidad, asi que nada!
jeje, si, los sueños se hacen realidad, pero a veces hay que trabajar para ello (aunque sea tan poco como algunas con ciertas asignaturas!).
a mí tb me pasa lode confundir amor y pasión, creo q se a lo que te refieres. lo que ocurre es que el amor, o asi lo interpreto yo, cambia segun de la persona de quien te enamoras.
pensandolo esta mañana he caido en que tambien tiene razon la escritora cuando dice q a veces te enamoras de una rama, y no te das cuenta hasta el final. y otras de un diamante, supongo!
Si, has entendido perfectamente lo que queria decir!
Y a veces no podemos enamorarnos de un un diamante por cualquier razon pero a mi me da pena porque resulta que son los que brillan aun mas por dentro.
Vaya eneri, veo que le has cogido gusto al mundo de la blogosfera! :-)
A mí también me hizo mucha gracia el artículo de Posadas: suelo leerlos porque aunque casi nunca estoy de acuerdo con ellos me parecen interesantes.
También está muy bien la teoría del monstruo de Frankenstein.
Yo pienso que es mejor que no existan los príncipes azules, lo que existe es el Superhombre y es mucho mejor!
jeje, si que le estoy cogiendo gusto si. lo de la teoria de frankestein llevo aplicandola yo ya un tiempo, creo q ocurre con la gente en general. los principes azules no existen, pero las pricesas rosas si existimos, y de vez en cuando encontramos algun superman, pero que tiene sus momentos clark ken, gracias a dios!
¿Princesas rosas?... Mucha madrastra hay por el mundo suelta!! jajajajaja! ;-)
bueno, eso ya es más adelante. quiza nos convertimos en madrastras por alguna rana que nos ha amargado la existencia, no?!
Pues como excusa me parece algo pobre; porque nosotros también nos encontramos por el camino brujas malvadas y no por eso nos convertimos en ogros...
q no??? yo ya he conocido bastantes, y creo qno han necesitado ninguna ayuda. la naturaleza, q os hizo un poco peores. incompletos o yo qué sé!
Ay Irene, a ver si va a ser un problema de elección (con "l")...
Así que ahora la culpa es de la naturaleza... Pues los demás no sé... pero yo me veo muy completito y, sinceramente, bastante mejor, sobretodo persona, (que es lo que a mí más me interesa de la gente) que muchas mujeres... al menos de las que yo he conocido en mi vida.
Pero oye, que tú eres un encanto!
era eso un chiste? es q estoy espesa. yo creia q hablaba del amor y cosas más abstractas. si es que ya no me funiona el cerebro.
bueno, gracias por el cumplido de todos modos.:)
¿Chiste?... ¿Dónde?...
Bueno, da igual, será un efecto secundario de la Gramática... que nos trastorna...
Suerte para mañana... y no hay de qué por el cumplido! ;-)
Y llego la que faltaba puesto a hablar de amor (que ya sabéis que yo quiero mucho, en general).
Me visto de santo frayle para deciros:
"Leeros y reflexionad, hijos míos. Leeros y reflexionad. No permitáis que vuestros propios errores os frenen las puertas al amor"
Me desvisto y me visto de mí misma: Si tan claro es que un alguien se cruzó y nos amargó, mandemos el recuerdo a algún lugar bien lejos (fuera de la memoria) y volvamos a la vida... No dejemos que las ranas, los sapos y las madrastras configuren nuestro sentir.
(Vale y yo prometo dejar de estudiar tan... poco porque "me se" llena la cabeza de pájaros)
el estudio nos afecta, vanlat, segurísimo. creoq ews la mejor época para pensar...en otras cosas y con una opinión surrealista.
si fuera tan fácil de tirara a la papelera todo mal recuerdo (mejor aún sería tirar la forma del contenido, o lo que sea q se diga en terminos de mr. salchica!)
en fin, menos mal que querer es una enfermedad letal e incurable. para la mayoría.
si fuera tan fácil de tirara a la papelera todo mal recuerdo
El primer paso es ser consciente, el segundo intentarlo... Saber si rechazas a algo/alguien porque te recuerda a una experiencia pasada que dolió o porque no te gusta lo que hay. No es lo mismo. Nunca nada es lo mismo.
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