somos afortunados. unos más que otros.
sin embargo, hay días en que me levanto y lo he olvidado.
lo tengo todo. o casi todo. y, como si mis amigos, mi hermana, mis gustos y amores, yo misma, mi lealtad quien soy, o mis lecturas y creencias fueran de segunda categoría, como si fueran transparentes, dejo de verlos.
afortunadamente, siempre llegan a tiempo unas frases breves pero ciertísimas de una de esas amigas de primer orden y vuelvo a encontrarme rodeada de toda la belleza que me ha sido dada, que, también, he ido buscando y elaborando.
y aun existe gente que duda de la medicina de la palabra.
tan potente ella.
qué razón tenía aquel profesor: somos médicos también nosotros. la letra haya sus caminos para traernos la felicidad.
1 comentario:
Hoy no hay poema, pero sí el análisis en torno al tema (desde un punto de vista filosífico)que hace un buen amigo (y también profesor) mio en su blog. Échale un ojo:
http://lenguaje.santoysena.com.mx/
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