31 enero 2011

comida para pensamiento

nivel básico de lógica: si "a" es igual que "b", y "b" es igual que "c", "a" será igual que "c".

sin embargo, como mi profesor de filosofía del lenguaje ha señalado, dicha conclusión es rápida y errónea, debido a que tendemos a confundir las representaciones de los objetos con los objetos en sí. pero conjeturas y explicaciones teóricas aparte, el problema lógico en sí resulta fascinante.
veámoslo con un ejemplo.

pongamos por caso que decimos:
-Mi primo es Juan. (a=b)
y
-Juan es un nombre de cinco letras. (b=c)
de ahí debería resultar cierto que:
-Mi primo es un nombre de cinco letras. (a=c)
pero no, mi primo en ninguno de los casos imaginables podría ser un nombre y menos de cinco letras.

pensándolo un poco detenidamente, uno se da cuenta de la cantidad de razonamientos, o conclusiones que damos por sentadas, tienen su origen en inferencias similares.
el nacionalismo, o los también mediocres regionalismos, sin ir más lejos, funcionan tal que así:

-Un tipo genial era Picasso. (a=b; y nadie lo pone en duda)
-Picasso era español. (b=c; sí, nacido en dicho país, cierto y verificable)
-Español soy yo. (c=d; también comprobable, también verdadero)
-Yo soy un tipo genial. (d=a; y de este modo, el salto de la lógica ha resultado mortal: la exageración, sino falsedad y subjetividad, de dicho razonamiento no puede ser ni más gruesa ni más pervasiva).

y así nos va.



30 enero 2011

el hombre en la sombra

el ocio es muy saludable en ocasiones. en muchas ocasiones. enseña a vivir.

un logopeda que no tenía título ayudó al que sería futuro rey de inglaterra a ganar confianza en sí mismo, a quererse un poco más y, así, a lograr deshacerse, aunque fuera un tanto, de sus problemas de tartamudez. así básicamente resumiría yo "the king speech", nominadísima película para los oscars de este año.
cada uno tiene dentro de sí, como el logopeda aquel, ¡tanto que dar!
sin querer, se debe ofrecer a los demás un pedacito de su saber, avalado o no.
y es que en ese dar y ese recibir cotidiano, de los amigos y los queridos, se nos va la vida. así entrenamos para nada. vivimos entrenando.
pero no importa porque es ese calor recibido y dado lo que nos mantiene, lo que nos hace crecer y felizmente.

algo de tiempo libre deberían tomarse los políticos de algunos países. ir al cine y ver alguna película. el problema es que parece que a ellos no los a ayudado nada ningún amigo, así de estultos siguen. creyendo que la educación es un adorno, actuando como si lo importante fueran sólo las apariencias, llevando naciones enteras a la ruina económica y, lo que es peor, intelectual.

¿qué importa que la foto salga bien? ¿qué importa que se les vote el cien por cien? mejor sería que desde la sombra comenzaran una cadena de acciones humanas, que trataran a sus ciudadanos como amigos: que les enseñaran lo poco, o mucho que de verdad saben, es decir, que les guiaran por el camino del mejor pensar.
no necesitaríamos sus nombres, sólo eso, a alguien que aunque sólo fuera un poco, desde su corazón, compartieran sus armas, porque creyeran en la perfectibilidad de la raza humana, que lo hicieran porque sí, que lo hicieran entusiastas, pero que lo hicieran, aunque fuera desde la sombra.







28 enero 2011

some sorts of love are american.


love at first sight is american.
love at first sight, first of all, is a myth. but an american myth.
why? because it is express. unlike real love, which requires time, this other type of love allows you to fall for somebody else without spending the time and effort that real affection requires.
the last type of love at first sight, or close to it, are the new american fashion (becoming, of course, more and more popular everywhere else as i write this lines): dating sites. there, capitalism and love at first sight, or first read, become one. love, therefore, becomes a good. a good, notwithstanding, with reward if you want so: a ring, sorry, i mean marriage. you dont need to do a thing. well, maybe a thing, some things: some clics, some choosing, some paying, some chatting and before you count ten you will be happily ever after engaged with the, literally, chosen one, as willing to fall in love as you, as short of time to do the real thing, i mean, the real world as you.
but maybe i am being to cruel. what do i know about the real world? isnt it american? isnt it electronic? quick, fast, and cheap is the future. maybe so love.

26 enero 2011

USA desde el ayer

Cuando llegué a este país vivía en lo uncanny/unheimlich.
Prácticamente todo lo que me rodeaba se me hacía plenamente familiar y a la vez absolutamente extraño. Era como vivir en la película que compendiaba todas las que había visto, las expectativas que tenía puestas y los estereotipos en que estas se habían venido formando; mientras que, sin embargo, todo me era nuevo, brillante y placenteramente aterrador.

Hoy, pasados dos años y medio esa sensación ha desaparecido.
Paulatinamente, pues, este país se ha debido ir convirtiendo en mi hogar/heim.

Sin embargo, hay días, o momentos, en los que instintivamente doy un paso atrás. Me coloco, dando una pirueta que no sabría enseñar, detrás de mi misma. Desde allí observo mi alrededor con la misma mirada con que lo vi el primer día. Oigo esos acentos tan marcados, agradezco su simpatía desbordante, me encandilo con su dedicación al trabajo, soy incapaz de reproducir su avanzada organización y admiro su optimismo individualista.
Pero todo dura sólo un segundo, un segundo que es como un viaje al pasado, un segundo tras el cual todo vuelve a la normalidad cotidiana. Y ya con los estereotipos más materializados, perdón, matizados, continúo como una más.
Apenas siquiera dándome cuenta que la de ahora es sólo otra distorsión en percepción más.



22 enero 2011

action vs words

“Don’t you think that actions are more reliable evidence than words?” Socrates.

Are they? Really? Maybe, if they existed. But do they? I mean, does anything exist outside from words?
We like to imagine that, for example, we either live or read, we either live or work, we either live or write. However, that distinction is deceitful.
We also like to think that our lives are as important as any other ever lived, even the ones of our heros, of the people we see in movies, follow in newspapers or imagine thanks to books.
However, that comparison is misleading too.

We are trapped, trapped by our own way of portraying ourselves, of understanding our identities, of creating our subjetivities. We can only picture and "read" and understand ourselves thanks to the filer of words. Our actions are reshaped, reorganized, recreated by words. And we are constantly rearranging these words in order to adhere to previous models, thinking, however, we are defying them. Reliability falls out of our picture. Action, evidence, objectivity disappear and we are left with our own tale, our own subjetive narration and just plain, heroic, novelistic words.

21 enero 2011

Agora y el amor

Me cuentan que la película Agora no obtuvo muy buenas críticas cuando fue estrenada hace un tiempo. Sin embargo, en mi opinión, es una de las mejores que he visto en años, quizá en la vida. Y por eso quiero hablar de ella. En realidad, una cosa no sé opone a la otra. Ni la crítica es muy fiable en la mayoría de los casos, ni mis análisis críticos se basan en mucho más que reaccionessubjetivas que luego trato, a veces, de racionalizar.

Creo que en este caso, mi opinión positiva acerca de la película se basa, a parte de un montaje espectacular, una historia que es entretenida y unas actuaciones más que aceptables, en los dos temas capitales que la configuran: la mujer y la religión, y un tercero que los engarza: el amor.

Pero un amor verdadero, no de esos que venden en las películas, en las canciones y en las tarjetas de navidad. No un amor obligado. Tampoco uno de mercado. Y mucho menos un amor por caridad, un amor fomentado por el cristianismo, un amor al inferior, al que se intenta salvar, por obligación moral. De hecho, es un esclavo el que, en la película, superando las barreras religiosas, ofrece un último gesto de inmortal pasión por su ama(da) al atenuar la peor muerte que la esperaba. Los cristianos y judíos la querían matar, sacarle la piel a tiras o acabar con su vida a piedras simplemente por el hecho de que las Escrituras, según ellos, dictaban que el lugar de la mujer no estaba entre libros, no pertenecía al reino de las ideas y ello la convertía, directamente, en una "bruja".

Davus, el esclavo, es en realidad, paradójicamente, el héroe de la película. Para mí, al menos.
Él muestra con su acción cómo las prédicas de la religión fallan ya desde sus orígenes. El amor es su ejemplo. A pesar de su conversión, del ateísmo al cristianismo, su capacidad de autocuestionamiento sigue viva. Por eso, cuando lo llama el amor, el verdadero, el que proviene del instinto, de la humanidad, de nosotros y no de ninguna doctrina o Libro, acude a salvar a quien considera un igual. Él, ya libre, tan inteligente y capaz de raciocinio como Hypatia (o posiblemente menos), es decir, un igual, antepone la vida de su amor a su seguridad y a todas las creencias que le han sido indoctrinadas. No porque haya aprendido algo, no porque crea que la mujer o la inteligencia deba ser salvada, sino porque el amor que surge verdadero, más allá de ficticias alianzas exteriormente creadas, le impele a hacerlo. Y él está lo bastante alerta como para atender a ello.


Ahora, con un poco de más calma, con más sosiego sólo pienso que es una pena, una lástima que la película recibiera tan mala fama. Aun hoy muchos de nosotros deberíamos aprender de ello.

18 enero 2011

de flor.

una memoria,
una confesión,
una anécdota,
y todos los hombres son,
como diríamos en cristiano,
unos auténticos capullos.


ya sé, ya sé
no todas las generalizaciones son ciertas,
pero eso tampoco quiere decir
que también mientan.

¡snap!

¡snap! o puede que sea un simple ¡clic!
lo oigo,
mi cuerpo siente también un casi imperceptible temblorcillo que se localiza, para se más exactos, en la cabeza,
y como si nada hubiera ocurrido,
(aunque de hecho todo ha cambiado: mañana estará despejado, los insoportables se desvanecerán, todos nosotros nos veremos bellos, tanto como somos, el amor vendrá acompañado de la esperanza y la justicia se dará de un modo u otro a quienes la merecen, es decir, a quienes yo no se la negaría)
continúo con mi vida,
con la que ya tenía,
aunque parezca que ahora luzca otros ojos.

14 enero 2011

eres dos

existían miles y miles de habitantes en la ciudad, pero ella sólo notaba la presencia de uno. la intuía. quizá porque la necesitaba. ahora ya no, ahora él ya era dos. pero su soledad se había multiplicado por infinito.
el tiempo, que todo lo cura, a veces abre nuevas heridas.

12 enero 2011

Un deseo

Ser más honesta al escribir.

Muerte a la perífrasis, a la metáfora, al retruécano.

¿Podré?
¿Seré capaz de hablar alto, escribir con tinta lo que en el instante pienso-siento? ¿Decir cómo a veces quiero arrancarte y arrancarme la piel de goce, de dolor, de ansiedad; decir cómo la vida sabe a poco y tengo ganas de comer más?

Quizá. Podré.

los libros que valen

los únicos, son aquellos que nos permiten pensar más allá de lo convencional, aquellos que nos impulsan a escribir, es decir, a vivir de un modo más íntegro, nuevo, ¿mejor?

tal como ocurre con los amigos, siempre viene del amor.

de viaje

Una carretera y horas, como la vida, por delante. Puedo hacer de ella lo que se me antoje. Mis pensamientos corren libres, mi cuerpo permanece, estancado, en este asiento reclinable. Leo. Escucho música. De fondo, se mueve una película de tercera B. Pero me muevo, y la banda me acompaña.
Un año que finaliza, una carretera que continúa y un sabor agridulce en la boca. Sabe a todos los deseos que voy a probar, a probar lograr.
La cabeza poblada de novelas leídas, y de las vividas también. Imagino todo lo que va a ocurrir. Esa posibilidad esperanzadora me alegra. Me alegra tener esa esperanza, la energía, y los compañeros de viaje que auguran un éxito. Probable. Al menos, me llevan con el impulso de vivir, o de repensar historias; de leerlas, escribirlas y serlas.