15 junio 2010

la dura realidad elegida

creo que algo se muere dentro de uno al acabar la carrera y tomar un camino, por muy errático que este sea, que casi seguro vamos a seguir.

tras el colegio o la universidad, creemos por un tiempo más o menos largo que podremos ser lo que queramos. cualquier cosa. anything. =everything. vamos a tener 1000 vidas y vivirlas y probarlas todas al completo. esta potencialidad no nos abri¡uma sino que, por el contrario, nos da poder. este es el único momento de nuestras vidas en el que seremos superheroes.
pero luego, una bofetada, o sucesivos golpes, nos van despertando a la realidad. se requiere esfuerzo. debemos elegir. nos comprometemos. sudaremos por ser lo mejor de nosotros mismos; para hacer, en todos los aspectos de nuestra vida, aquello que, no sólo mejor sepamos hacer, sino también que más placer nos de, que más nos convenga y que más afín a nuestro yo verdadero sea.
y esta tarea es bien difícil. durará de por vida. habrá sido una apuesta al todo o nada. y será así cada vez. por siempre.

sin embargo, no nos deprimimos sino que, sin haber sido en todos los casos educados en la cultura estadounidense del "personal achievement", luchamos contantemente sin darnos por vencidos. y no es porque somos el único animal entrenado para el masoquismo-con su tropezase constantemente en la misma piedra. no.

lo que ocurre es que, a la par que elegimos y aprendemos a luchar por nuestra elección, aprendemos también la maravillosa otra cara de esta a veces dura realidad. que es real. y que es nuestra.

No hay comentarios: