25 julio 2010

con todas las inusuales anécdotas que me ocurren últimamente podría escribir una novela ramoniana. por ahora, me conformaré con tres líneas.

tu quisieras ser panadero, yo, tú, poeta

Hoy día
tengo un deseo,
uno pequeño y humano.
Yo solo quisiera ser,
o más bien poder escribir,
como Ángel González.

Decir apenas sin esfuerzo,
o aparentando una sencillez total,
todo aquello que se me pasa por el alma.
Y sentir con tal profundidad,
que mi poesía se volviera
la más tradicional filosofía,
lo que viene a ser,
al fin y al cabo, vida,
pura vida en palabras desordenadas.
Desearía poder desnudarme,
mostrarme en fragmentos humildes,
y saber
o al menos querer creer
que alguien, allí, al otro lado,
me lee, me entiende y,
gracias a mis letras,
se sabe menos solo,
cree en el amor amor,
o entiende que el dolor
-a veces también el placer-
sólo existe
si es agridulce,
y que la muerte es
natural como la vida misma.

En cambio me conformo con esto,
con simulacros y tentativas,
y remedando e intentando entender,
me creo más cerca de su verdad,
esa que sólo él en su arte
con su discurso tan natural
nos ha sabido mostrar.

No creo ni tan siquiera que con mi escritura
ni con mi vida
ni siquiera con mi lectura
haya llegado a comprenderlo
en toda su profundidad.




24 julio 2010

una carta. un cierre.


entrando en la cafetería ya mi mirada se posó en su nuca. parecía realmente concentrada en aquello que escribía. imaginé, casi sin poder controlarlo, toda la historia que rodeaba sus palabras.
se trataba sin duda de una carta. así, metódica pero inspirada, redactaba las últimas letras para quien ya hacía tiempo que no le dirigía ninguna. no eran inútiles frases, eran sólo pensamientos que, enredados en su cabeza, debía ordenar para poder sentir esa historia concluida.

no me costó apenas esfuerzo empezar a suponer su respuesta. su carta hablaba, no me cabe duda, de sentimientos coherentes. de cómo aún la embargaba el dolor, pero más que nada una especie de ansia de venganza. decía que se sabía injusta, que no se había dado más que una repetición la acostumbrada historia fallida pero que ella, a pesar de ello, se sentía traicionada. y ahora todo se mezclaba en su cabeza, y no tenía palabras con que describir eso que sabía con certeza que aún los unía, aunque fuera de manera extraña. pero como él, ya se había demostrado, era demasiado egoísta, demasiado simple, quizá simplemente incapaz para la vida, que es complicada, ella sabía que no debía más que aceptar todo lo vivido como experiencia, grata, como felicidad para la nostalgia. y de ahí que le escribiera, aún con un poco de esperanza, no, esperaba, por un futuro como el pasado, sino para que aprendiera de el error de ambos y sobre todo, ahora se daba cuenta, para que así él le enseñara ese nuevo modo de relacionarse, al haber evolucionado, sin amor, pero con los restos de aquello que sí había sido cierto, que era mucho, y aún le pesaba.

pero puede que no fuera así. probablemente ella estaba simplemente escribiendo una historia casi de ficción, quizá un tanto autobiográfica. es posible que, inspirada por el trabajo de Sophie Call, estuviera proyectando en sus divagaciones un tanto de afanes literarios, y un poco también de pasado enmarañado.
no obstante, ya digo, tampoco de todo esto, puedo estar segura.

17 julio 2010

fortunate and proud

sometimes it hits me suddenly, while I am reading a page, as I was doing just one moment ago.
in just that one second I become aware of how grateful I should be for being who I am.

I am not only lucky for being able to do what I absolutely love for a living, for being surrounded by people I love and love me back as well, marvelous people who deserve no less than all the moments they enjoy in their respective lives, and for having time and the money enough to spend in small pleasures like reading, going to the movies and concerts, people, self indulgence, good food and wine, travel or cute clothes, but also for being aware of the fact that I am that person.

it comes and goes. the feeling. anagnoresis.

it is just a second, but its taste stays in my memory for me to keep enjoying its after taste
and never forget my luck has been chosen by me in the sense that I decided to learn even from my bad choices, misfortunes and wrong doings. only thanks to those, part of my history now and forever, can I proudly state I am one of the most fortunate women in the world.

toy story 3 y el let go


toy story 3 es una película para niños.
supuestamente.
sí, ¿0 no?
su mensaje moral básicamente trata de educar a su audiencia en la necesidad de lo que en inglés se llama "let go". una traducción fiel, de acuerdo con el diccionario, sería "soltar" pero en un sentido más matizado se refiere al aceptar el final de todo aquello que nos rodea.

precisamente el otro día, leyendo un poco más del libro de Eagleton que me tiene obsesionada (After Theory), me encontré con un pasaje en el que el crítico analizaba la incapacidad estadounidense, y yo añadiría que cada vez más global, de aceptar el fracaso.
el fracaso es cualquier acontecimiento que pone un límite a aquello imaginado. en este sentido, la muerte es el mayor de todos. termina con nuestra vida, con nuestra mayor y más fácilmente adquirida cualidad, aquella que nos caracteriza más intrínsecamente: estar vivos.

pero cada día nos enfrentamos a pequeñas muertes. pequeños ejemplos que nos recuerdan nuestra imposibilidad para lograr todo aquello que nos propongamos.
del mismo modo que no podemos vivir eternamente, a pesar de lo que algunas religiones quieran hacernos creer para endulzar nuestra conciencia, no siempre lograremos controlar todo aquello que nos rodea.
por eso a veces sentimos que morimos un poco cada vez que, simplemente, se nos recuerda que somos humanos: tenemos límites.

un despido en el trabajo, un kilo de más, una ruptura amorosa, la primera arruga, un trabajo manual con imperfecciones, un segundo puesto en una competición, la primera cana, un rechazo de una petición, la primera caries, un aislamiento social, una ruptura ósea, una habilidad inadquirida, unas piernas que corren menos, un amigo perdido etc.

por supuesto que, como pequeñas o grandes muertes, estos acontecimientos son pedacitos de tragedia en nuestras vidas. no cabe duda de que viviríamos más sosegadamente si no envejecieramos, si fueramos siempre los primeros de la clase y los más queridos de todos nuestros conocidos. pero si no muriéramos, si no tuvieramos que "let go" un poquito cada día no sabríamos apreciar aquello que tenemos y seríamos, por ello, simples meros autómatas.

es difícil y es triste dejar pequeñas muertes sembradas en nuestra vida pero más triste es no saber lo que es sentir estas muertes.
en una sociedad que nos está educando cada día más en la mentira de una vida sobrehumana, con botox, misticismos y resurrecciones, liposucciones, premios amañados, perfecciones en la imperfección, tintes de pelo, calmantes emocionales etc., no está nada mal que una película intente mostrarnos de nuevo dónde está nuestra humanidad, y mucho menos lo está que lo haga precisamente cuando estamos menos anestesiados con mentiras, en la plena receptividad de la infancia.

sí, toy story 3 es una película para niños, indudablemente,
pero también lo es para los niños adultos que debemos redescubrir en qué consiste nuestra mayor cualidad: en el let go, que, afortunada o desafortunadamente, sólo se aprende y mejora practicando.

16 julio 2010

felicidad natural

y de repente, descubrir que existe, de hecho, un camino hacia la felicidad.

quizá es el aprendizaje más duro pues, como ocurre con la verbalización de los deseos, su reconocimiento obliga inmediatamente al compromiso con uno mismo: deberemos, de entonces en adelante, hacer todo lo posible por alcanzar ambos (o simplemente la primera pues, si somos coherentes, los segundos son meros desarrollos en detalle de esa felicidad).

e incluso el mismo recorrido hacia ella se torna cuesta arriba. demasiadas esperanzas para algo tan frágil. hay que ir avanzando con los cinco sentidos puestos en la vereda, bajo los pies y en el mismo cuerpo que la recorre.
y tanto esfuerzo para que luego, de vez en cuando, oigas voces que te expliquen que, en el fondo, esa felicidad que persigues no está en un punto oscuro de la lejanía, que está en "el caminar", que te la labras con tus pasos, si los das de acuerdo a tus instintos y siempre que los tuyos ayuden a otros a recorrer el mismo tramo.

pero ello no hace más que facilitar incluso más la tarea, la vuelve cotidiana y natural.
está al alcance de la mano. la mano de todos y cada uno de nosotros.
si parece que nos desborda es porque somos incapaces de ver con distancia lo que nos ocurre ahora mismo, en este exacto lugar y ello ocurre porque nuestra ansiada felicidad está recubierta de mentiras y ropajes de neón.

soñamos con un éxtasis de felicidad con forma de anuncio, con mayúsculas, oros, orgasmos y postergaciones que la van aumentando de tamaño, sin darnos la tregua necesaria para descubrir que la felicidad, como todo lo auténtico, es humilde.

hay felicidad en el trabajo bien hecho, un poco también en la recepción de ese trabajo, como en un libro, un plato, una película o una conferencia atendida; hay felicidad en el compartir momentos con otros, en ese darse en que consiste una buena conversación, una sonrisa, una carta o una mano con la compra; existe felicidad en la generosidad sin interés premeditado como ocurre en el amor, la amistad o las acciones sociales; existe felicidad, pues, en cada posible momento del día en que nos esforzamos por volver a ser nuestros más puros yo.

sin ropajes, sin pretensiones ni miedos.
andamos el camino.
andamos con la felicidad y esta se nos hace ausente, sin dejar de estar con nosotros
porque estamos en calma,
simplemente andamos,
unos con otros. lo más natural del mundo.

14 julio 2010

una de amores

una de las falacias que la sociedad norteamericana difunde con mayor intensidad y exito es la del amor eterno y perfecto.

decirlo parcamente, asi, en realidad no explica mucho ni en profundidad de aquello a lo que me refiero pero creo que igualmente puede entenderse si se piensa en toda la parafernalia que acompana a este y lo incentiva: de anillos de compromiso, a las series de television donde las familias son incorruptibles, pasando por los anuncios con flechazos instantaneos o los vestidos de novia que se pueden reservar con anos de antelacion.

mas alla de la alienacion que estas imagenes producen en el individuo, consumidor en todas las instancias del proceso de cualquiera de los productos que van acompanando a este amor de pelicula, el problema que mas afecta al individuo que se expone a ellas es el de la infelicidad.

creyendo que el amor es casi un asunto del destino y, sobre todo, bombardeado por el mono-tema las veinticuatro horas de su dia, el norteamericano medio tiende a organizar su vida y evaluar su bienestar en relacion a esa imagen de amor regular y plastificado que le han vendido desde nino. no concibe, ni una alternativa a esa utopia de estilo de vida, ni tiene tiempo emocional para investigar otro tipo de fuentes de placer.

y como digo el nortamericano, digo el comun de los mortales que viven en esta sociedad cada vez mas uniformizada.

pero en realidad yo no queria hablar de esto, o no tan largamente. solo queria compartir la inmensa felicidad que me esta deparando estos dias la lectura de un libro de Terry Eagelton recomendado pro un amigo al que estare, por ello, eternamente agradecida.

humor e inteligencia se combinan en su After Theory para repasar la evolucion de la teoria y la cultura de los ultimos siglos. resumirlo asi suena simplista, y lo es. pero es que mas alla de su tema general, lo mas loable de la empresa del autor es su capacidad para sintetizar las mas basicas premisas sobre las que se basa la labor del teorico, sobre las que raras veces nadie hace una reflexion ni valoracion moral (quien sabe si por incapacidad o por desconocimiento), y elaborar una irrebatible defensa de su necesidad politica (que no utilidad).

repetir lo que el dice a lo largo de sus paginas seria una labor innecesaria cuando leerlo en sus palabras es, no solo mil veces mas iluminador sino tambien un autentico placer ( a lo, como el mismo recuerda, Brecht);
si la felicidad tiene forma, en mi caso, hoy mismo, esta contenida en la forma y el material de sus palabras.
reconocerse en el amor por la teoria, mientras se explica su injustificada suficiencia, y se esta amando la teoria que se lee, como diria el anuncio de mastercard "no tiene precio".
aprender esto, o verlo explicitado tras anos en el desconcierto de la critica, tampoco.
descubrir la existencia de afinidades tan basicas, obvias, y, a la vez, calladas por su "subversividad", incluso menos.

para el resto de amores, durante el resto del dia, eso si, nuestra sociedad aun nos pide la targeta de credito.
habra que ver cuanto aguantamos.

12 julio 2010

elitism a la jouissance

it is normative in our society thaty people do not throw themselves with a hoarse cry on total strangers and amputate their legs-Terry Eagleton

reading some things make me tremendously, utterly happy
and I pity those that cannot* read-read.

* do not enjoy to

07 julio 2010

they say, if you put something into words that something becomes more real.
so, from now on, I won't verbalize anything. in that way I will be able to live in an unreal, almost magical, world.

the only problem i will need to face is trying to prevent my mind from going on thinking with words.
or is my head device more powerful than that?

a task. just a thought.

it's extremely difficult to learn to love what you love. to learn to enjoy what is pleasurable.

it takes courage, certainly.

and it takes time.
some big amounts of time.

06 julio 2010

excuse me

excuse me,
i have a very tiny thin skin.
almost transparent they said.

anything,
no matter how soft it is
can go through it,
excuse me.

i can easily break.

no-one put on the label, though
"fragile item"
they forgot.
excuse them.

but when the wind blows
i feel it, i shake,
and if you shout
aloud
i may crack
excuse me
it is anyone's fault.

i would rather be a stone.

05 julio 2010

un pupurri de cabeza

lo peor es esta nebulosa. esta dispersa y mareante nebulosa que ni tiene forma de nube ni color grisaceo. simplemente me desconcierta.
y es de lo único de lo que puedo escribir porque transmitirla, plasmarla como merece, para que se entienda a qué me refiero supondría desordenarme. o simplemente mostrar lo desorganizada y a saltos que va mi cabeza. pero, ya se ve, es imposible, no puedo dejar de estructurar. pasar de un asunto a otro. cada segundo, como enferma con deficiencia de atención, así, pero para la vida. es una lástima, saberlo y pensarlo y no poder remediarlo.
casi como una enfermedad de la que nadie se puede curar. porque me pregunto yo, y este amigo cirujano que yo tengo, no me podría colocar un chip en la cabeza que me la paralizara, que me permitiera dirigir mi pensamiento a un ritmo más moderado, de un modo más racional, o quizá, simplemente, más normal.
y ya sé, a quién le importa cómo me va a mi la cabeza, o la imaginación, o si me funciona más o menos del modo en que debería. ¿no debería bastarme que me importara a mí? no. pues no me ocurre así. y necesito escribirlo. y me lo cuestiono. y eso lo debo verbalizar. como si así todo fuera a re-colocarse, todo fuera a cobrar algún sentido, como si sí, como si así pudiera comenzar de nuevo, ver lo que me rodea de otro color, a otro ritmo, en otra posición.
pero ya lleva demasiado tiempo sin ser así.
ni siquiera escribo mejor, ni peor. ni de un modo distinto.
al menos no me aburro. o a veces, pero tengoe sos instantes, me quedan sí, unos momentos salvavida, los voy a llamar así, porque me anclan a mi misma y me dejan sola e independiente. son pura muestra de amor. el mío, que es suficiente, a la vida. y no hay manera, no, no la hay, de explicarlo mejor. amor a la filosofía. pero ni siquiera es eso. es el pensamiento, de otros, que perdieron el tiempo agradablemente viviendo, perdón, dándole vueltas a la cabeza con problemas que sólo a unos pocos, afortunados, sinceramente, eso creo, les importan.
que me da lo mismo. no me gusta la palabra "darle vueltas", como si no llegaran a ningún sitio. pero quizá sea así, no llegar, y ¿qué más da? lo importante es el camino blablabla. creo que esto mismo ya lo dije. en fin, sí, el camino, ¿qué camino?
o mejor dicho, ¿cómo hacer que el camino merezca la pena? ¿debe merecerla? si, de un modo u otro, subjetivo probablemente, debe ser justificada nuestra vida.
para nosotros mismos. eso es lo difícil. cómo hacerlo, cada segundo, siendo cosnciente y disfrutándolo.
y la cabeza que va,
y esos instantes de vida, escondidos, que se escapan, que esperan en la próxima habitación, o la próxima vuelta de tuerca, o más bien, en una parte alejada del camino, o no, están por venir.
menos mal que existen y me justifican.
o nada tiene sentido.
qué más da. mientras disfrutemos,
o no,
qué remedio. es lo único que sabemos hacer. seguir dando (le) vueltas.
para mí, para tí, para nadie.
es lo único que sé hacer.
habrá que aprender a aceptarlo.

02 julio 2010

why do i hate surveillance cameras and other stuff

Whenever someone used to ask me what was the thing I appreciated the most of another person, as much i am used to reply to such "list-alike" questions, I never knew what to respond.

Since I wanted to be sincere, I thought of my most beloved ones and tried to guess why I felt so close to them, what made them so dear to me. But my answer was never 100% true.

Today, however, I think I found the answer: honesty.
I just can't help but falling for transparent people.
Those ones that bluntly show how they really are, and what they show is always pure truth.

When they do or say something, my friends, they are always completely sure that it is the thing they should be doing. They do not need of an external rule, they do not care for someonelse's pat on their back: they just do whatever they think is the right thing to do, because being honest to themselves is their best reward. Reward they do not enjoy because they are unable to tell the difference between giving the best of them to the others, just for the sake of it, from doing it in order to avoid some punishment.
My beloved ones, admired as well, of course, do not need surveillance cameras in order to behave. They just live ethically because they are their own bosses and, in that sense, even when they do wrong, they are showing the rest of us how to behave well.

ps: but for once, let me redirect you to the source of this inspirational moment of revelation and of love towards my real good friends.
Someone already explained all the reasons behind my choice, far better, far detailed, organized and enlightened than I did.
Please, give it some minutes. Really worth the reading:
http://www.philosophynow.org/issue79/79westacott.htm