31 mayo 2009

y secretamente deseó que nuca le confiaran el destino de una nación pues sería una tiranía de absoluto orden desquiciado





(pero los secretos son así, silenciosos, y prosiguió su vida como si nuca se lo hubiera descubierto, como si sólo fueran delirantes sueños de grandeza).

28 mayo 2009

la naturalidad de lo sincero

cuanto más sencillo es algo, más verdad hay en ello. 
aunque la claridad no es condición de autenticidad, 
ésta no puede existir sin la primera.
por eso creo que, de algún modo, 
lo que viene de manera natural, 
surge de modo pausado 
y se siente como original,
es lo que menos percibimos,
lo que menos valoramos
y a lo que menos atendemos
pero es lo que nos llega de verdad.

22 mayo 2009

el placer de la mirada



me resulta curioso que en muchas ocasiones somos no sólo actores de nuestra vida sino también espectadores indirectos.
me explico, mientras vivimos, como nos sabemos observados, creamos una imagen de nosotros mismos ficticia, claro, porque carecemos de lente o espejo para vernos, con la que tratamos de simular lo que los otros están percibiendo.
esa imagen nunca se corresponderá con la de ninguno de nuestros espectadores, por supuesto, pero más allá de este hecho, lo que me parece llamativo es cómo la simple acción de vernos imaginariamente, ya está condicionando nuestro modo de actuar. 
o sea, en realidad, es el sentirnos observados lo que nos condiciona y eso es algo de lo que nunca podremos escapar. entonces, viene a ser lo mismo que si no lo estuvieramos. al menos, hoy en día. 
me pregunto si esto habrá sido siempre así, si no está siendo cada vez más potenciado por el auge de la imagen que se está dando en nuestra sociedad. me parece muy curioso pensar pues, cómo se percibirían, cómo configurarían su subjetividad las gentes de siglos pasados si carecían, entre otros, de este factor tan relevante que puede pasar incluso inadvertido hoy día.

en mi prisión

me estoy perdiendo.
olvidando lo que fui,
lo que me gustaba de ese ser,
se está yendo, 
y
en 
do...

y todo,
por el esfuerzo de controlar-me,
oh, paradoja!
y sabiendo que está allí,
reconociéndo-lo,
viéndo-lo impasible, atento, guardián,
desde dentro de mí,
no escapo a su prisión,
no he descubierto aún,
cómo salir de las cadenas de su sujeción.

18 mayo 2009

¿y eso para qué sirve?

si uno estudia letras, como es el caso de quien escribe, esta pregunta no sonará desconocida.
multitud de veces se nos pregunta, con una inocencia que no peca de ignorante e insultante, la razón final por la cual nos dedicamos al estudio de las artes, sean estas de tipo que sean.
como si el trabajo intelectual tuviera que siempre responder a un fin teleológico, nos vemos, en la mayoría de las ocasiones, forzados a inventar una justificación que no se corresponde ni siquiera ligeramente con la verdadera causa que nos llevó a ocuparnos de lo que hacemos.

nos obligan, pues, con una violencia soterrada, a justificar, en cierta manera, nuestra pertenencia a una academia que, parecen sugerir, debería reducirse al estudio de lo útil, de la ciencia, y, si aún pudieran ser más exclusivistas, de aquellas ciencias prácticas nomás.

en su actitud observo yo, no sólo la estupidez a la que antes aludía, sino también una envidia tremenda. la envidia de quien no disfruta con lo que hace y desea que aquel que sí lo hace, tenga algo de lo que culparse: el goce.

y sí, en esta entrada quiero, primera aunque no únicamente, defender eso mismo: el estudio, el aprendizaje y los posibles conocimientos que de ello se puedan derivar (éstos últimos siempre relativos a la inteligencia e intereses individuales) como fin en sí mismo. existen dos razones bárbaras e incontestables, a mi parecer, para hacer así. por un lado, nuestro pasajero estar en el mundo, como individuos y especies, nos debería, aunque sólo fuera de modo inconsciente (pero también con cierto talento para no empobrecerla y acortarla aún más), conducir a elegir hacer siempre aquello que más nos agrada, sobre todo cuando esto va a ser algo en lo que vamos a invertir la mayor parte de nuestro tiempo. 

por otro, porque este conocimiento no es tan inútil como pudiera parecer. cada uno puede arguir una razon diferente al respecto. yo las he oído variadas y muy acertadas. para mi, la principal es que el arte está plenamente interrelacionado con la cultura, la sociedad al completo y en todas sus manifestaciones, es decir, con cada uno de los individuos que la integran. y yo, como individuo, me siento igual de tocada por lo político que acontece a mi alrededor, que por lo económico, la historia que me llevó hasta aquí o el arte que se derivó de todo ello. es más, éste no es más que un compendio de todo aquello y entenderlo en su total complejidad, apreciarlo en su justa medida es hacer lo propio con mis semejantes y, finalmente, conmigo misma. es aprender paso a paso de la filosofía vital, en todas sus vertientes y posibilidades variadas, complementarias e iluminadoras. 

y no sólo no creo que exista nada más útil para iniciar una posible mejora del mundo, en la medida de nuestras capacidades, sino que no existe, dentro de mi ceguera (posiblemente) subjetiva, (casi) nada más interesante, apasionante ni satisfactorio a nivel intelectual y emocional que eso.

eso sí, cada uno que opine como pueda/quiera.

15 mayo 2009

just sometimes

- it just doesn't feel right.
- but, why?
- i mean, not always, just sometimes. i feel like my mind cannot think straight anymore.
- i don't get it.
- like its all blurry inside my head. and it didn't used to be like that.
- no? how was it then?
- i could think clearly, you know? i could basically think.
- but is it always like that?
- no, it isn't. but it feels strange when it is. like having mind and feelings all tangled up in one whole mess. and not knowing what to do to separate one from the other, to be oneself again.
- and how does it feel, which are the sympthoms? like, do you do something particularly awkward?
- mmm, i do have dialogues with myself. 

13 mayo 2009

está oscuro allá dentro

es tan fácil curar una herida
y, a la vez, casi imposible sanar la mente

un día despiertas triste y nadie, nunca, te explicará cómo cambiar la situación.
una bala, con unas pinzas, como en las películas, la extirpas, pero ¿quien inventó utensilio para hacer desaparecer la melancolía? ¿dónde está la receta para recobrar la esperanza? ¿quién conoce la medicina que devuelve la felicidad?

por suerte, otro día, clic, algo dentro vuelve a colocarse en su lugar, y todo vuelve a brillar como de normal solía. uno se ha alejado de la nube, ha salido del círculo vicioso, se deja llevar y, curiosamente, recoge las riendas de su alegría. pero no ha habido operación, consejo o pastilla de por medio.

quizá sólo sanó el tiempo. 

11 mayo 2009

racial and national issues

One of the things that struck me the most while applying for a place in an north American university was that they always asked me, somewhere, about my race. They wanted to know if I was “white”, “latino” or any of the other multiple choices I was offered. I just didn’t know which box to cross out. Or worse, I didn’t even care. Mind you, I still don’t and I don’t think I ever will.

Today, while reading a very interesting article, all these memories came back to me and made think about the fact that there is a strikingly high percentage amount of people in the world that, on the contrary, do care about not only the “race” they belong to, but also the country they were born in. As if it had left some kind of permanent stamp on them and they couldn’t think about themselves without seeing themselves as belonging to that particular group.

The problem I see in this is that it promotes understanding differences in terms of communities instead of individuals. In some cases, with particular characteristics, it might be true that a certain culture can encourage some specific traits that can be traced in all the individuals of a place or race, but that happens the least of the times.

I personally think there are several disadvantages, so to say, in confronting life in that way. First of all, it prevents one to see the particular differences and, therefore, also the similarities that can bond people globally. Stemming from that, it endorses nationalism. So, saying that one’s origins are anyhow better than another can lead someone to conclude that other’s aren´t worth it the while. And, as we all know, that could be very dangerous. But, remaining in a closer level, it prevents people from enjoying life at its fullest.

What I mean is that there is so much outside still to be discovered, explored and relish that there is absolutely no point in remaining blinded by the walls of one’s own country or race’s superiority and virtues.

Of course there are differences across frontiers and seas, like they are in between people in general. But as it is harder sometimes to understand someone from your own town, someone that may even speak your own dialect, one can discover also how easy it is to comprehend someone raised by a complete different cultural system with a strange mother tongue. All it takes is to broaden one’s mind. To accept that there are differences, that they are even more interesting than the similitudes and just as acceptable and valid as one’s special features, is a humble act that everyone should try because it promotes love. And, as the song used to say, “all you (and we) need is…”

Specially now at days.

08 mayo 2009

llena de odio I

realmente no odio a nadie (aunque existen dos personas en mi memoria que relaciono con ese sentimiento porque sí, quizá sigo odiandolas en el recuerdo).

pero existen particulares situaciones, pequeños hechos, mínimos rasgos de carácter, posturas, actitudes y comportamientos que rozan el nivel de tolerancia que mi piel y cuerpo soportan.

hoy me voy a dedicar sencillamente a enumerarlas, para ver si así me desprendo de las fobias, o las comparto y defiendo, o sólo las exhibo en un intento por convencerme de su autoridad.  

1. odio cuando una persona se queja de una supuesta vejez para justificar su comportamiento, cuando sería mucho más sencillo reconocer que son jóvenes pero de otra manera diferente a lo convenido

2. odio la gente que respira fuerte durante el día. simplemente me ocurre así

3. odio la gente que alardea fingiendo ser delicada, dulce e inocente

4. odio cuando la gente te conoce, te reconoce, te ve y sin disimular apenas, aparenta estar muy interesada en la hoja que pisa, el pájaro que vuela, sus uñas o el hombre que acaba de pasar

5. odio la gente que un día está de buenas y al otro de malas. aunque no me ocurre con todo el mundo y yo también soy así. caprichosa que es una.

6. odio la gente que me odia por estupideces. la odio incluso más que ella a mí. porque yo siempre, siempre gano.

7. odio la gente que consigue que cualquier tema acabe convirtiéndose en un monólogo sobre ella.

8. odio que la gente de cosas por sentado y no me pregunte mi opinión. mucho más si lo hacen porque soy mujer y ellos hombres. 

9. odio que me hagan esperar. lo requeteodio.

10. odio la gente que habla bajito porque creen que resulta sexi. que piensen en los sordos, por favor.

to be continued...
aun hay mucho oidio que dar
 

07 mayo 2009

por la inspiración

hay un asunto que me inquieta.

la intuición.

¿qué es ella con respecto al conocimiento puro y racional?

en muchas ocasiones se conoce a una persona completamente pero no se es capaz de poner en palabras qué es lo que realmente sabemos de ella, por qué hay aspectos de ella que nos gustan y otros rincones oscuros que adivinamos como futuros peligros.

esa habilidad es lo que yo llamo intuición. y se contrapone a la pura lógica.

no es que hayamos invertido tanto tiempo con esa persona como para predecir sus reacciones, no. no es tampoco que ella nos haya dejado saber explícitamente cuáles son los rasgos de su carácter. ni que tengamos tanta experiencia en tratar con los demás que ya hallamos desarrollado un sistema del comportamiento humano con el que medir las acciones ajenas.

es simple intuición.

el problema es que no se puede teorizar sobre ella. como si de una especie de tabú teórico se tratara, no se han escrito aún libros sobre ella y si los hay, en realidad, hablan de otros fenómenos porque, al tratar de racionalizarla, de sujetarla a patrones y fijarla en un sistema regido por la causa y la consecuencia, la pervierten, la trastocan y desintegran.

no quiero decir con esto que no se trata de un problema científico (menos cuando, hoy día, decirlo sería restarle la importancia que me merece y privarla de un espacio en los estudios del tipo que sean); aunque, paralelamente, no creo que deba ser analizada. 
paradójicamente, ella es previa a cualquier análisis, y debe mantenerse allí porque lo incentiba y guía. no puede ni sabe hacer otra cosa. pero deberíamos tenerla en cuenta, reconocer su existencia, nombrarla y caracterizarla como lo que es: intacta, impóluta, virgen, libre y, por ello mismo, caprichosa.

creo que es precisamente por esta última razón por lo que solemos hacerla de menos. como si por voluble fuera más trivial, ligera y ello le restara verdad, profundidad y razón. cuando, de nuevo paradójicamente, a veces, lo aparentemente más liviano resulta lo más consistente y cierto. 

06 mayo 2009

hace sólo 9 meses

se ha acabado el semestre. el segundo que llevo aquí, en los EEUU, y me parece el mejor momento para hacer una breve reflexión y balance de lo vivido desde mi llegada, hace menos de un año. ¿quién lo diría!

estos 9 meses han pasado más veloces que nunca pero a la vez, recuerdo mi "yo" de mayo pasado y lo veo lejano, pequeño, absurdamente desubicado en un espacio que se me nubla.
tan poco tiempo, tan fugaz y tan concentrado de experiencias que casi se asemeja a un agujero negro. se me hace, por ello, bastante complicado tratar de resumir, ordenar y clarificar estos recuerdos, así como mostrar cuál es el resultado de todo ello: cuánto he ganado.

a nivel de puros hechos, no he perdido el tiempo: he cruzado el océano, he viajado a chicago y san diego, he ido a conciertos, he visto las hojas multicolorearse, los árboles llenarse de flores extravagantes, las ardillas volverse más gordas que ratas, he ido a fiestas, he ido a reuniones y conferencias, he ido a clase y a una iluminada biblioteca, he ido al mall, al cine, a comer por ahí a mejicanos, dinner, etc, al parque, a museos, incluso de noche, y a discotecas. he dado clase por primera vez en mi vida, me he mudado dos o tres o cuatro veces, me he comprado una bici, he visto nevar y la nieve más bonita del mundo, he escrito "papeles", he odiado el MLA, he esperado demasiados autobuses, perdido otros tantos y andado mil millas, he enseñado mi ID demasiadas veces, y más aún he tenido que explicar que era español pero que tenía la edad, he vivido en una universidad de lujo, he disfrutado de todas sus ventajas, he hecho tantas cosas por primera vez que resulta ridículo pensarlo y más, enumerarlas.

en un plano más humano, he convivido con una loca, he aguantado a esa loca, he sobrevivido a esa loca, he conocido gente estupendísima, he descubierto que aún se puede aprender más de los que te rodean pero, que más importante que eso es lo que se disfruta estando con personas estupendas, me he enamorado de la amistad, del amor, de mucha gente, (y sé que no puedo hablar ni lo suficiente ni claramente para explicar lo que toda la gente que he conocido me ha aportado y me ha dado), he tenido mi primera experiencia con la enseñanza realmente y he descubierto un futuro excitante, entretenido y que me llena, he re-descubierto que amo escribir (segunda cosa que me llena: comienzo a hincharme), he aprendido una nueva legua "colomístico", he conocido gente extraña, me he superado en mi capacidad de aceptación, he aprendido mucho más de mí, he superado mi miedo a vivir sola, he comprendido que nunca aprenderé algunas cosas, he aceptado más mis puntos débiles y quiero aún más los fuertes, me he vuelto más independiente (¿más?!), he aprendido que los estereotipos solo son bulos parcialmente ciertos, he conocido gente extrañiiisima, he visto mi lado infantil, mi lado adulto, mi lado optimista, el energético, el angustiado, el estresado, el deprimido y el que siempre sale adelante, he llegado a aceptar que el insomnio es una manera de vida, también he echado de menos, claro, pero basicamente, he vivido...

ahora que lo pienso, básicamente, nada ha cambiado verdaderamente:
sigo siendo la misma,
esencialmente feliz por el mero hecho de saber que seguiré "experienciando" la vida así, intensamente, con los ojos bien abiertos para no perderme nada de lo que me pueda ofrecer, para disfrutar hasta el último momento de todo lo nuevo, enriquecedor y, por ello mismo, placentero que se aparezca en el camino. 

franz ferdinand

como un cuerpo de marioneta, como un autómata sin razón, sólo instinto, sólo energía, locura, música recorriendo mis venas, en trance.

como recién nacida, cuando no sabes qué es lo que te rodea, o cuando comienzas a reconocerlo pero estás más aislado de lo que nunca lo estarás porque no te importa quien sea que te da la mano, quien te mira, no sabes que existe el verbo juzgar.

como en los mejores sueños en lo que eres tú sin
 ser tú, que sales de tí y te observas del modo en que ves una película, con extrañamiento, reconociéndote y descubriendo tu otro yo.

como la primera vez que te miras en un espejo, supongo, o tras un corte de pelo, cuando el reflejo ya no es exactamente tu tú de antes.


como si fuera ese reflejo, ajeno, móvil, hiperactivo, de adrenalina pura, sin conciencia de la conciencia, sólo sintiendo la música, sólo movié
ndome, sólo disfrutando, viviéndo y dejándome vivir por la vida que me atravesaba

así de bueno fue